La pobreza y la guerra disparan los casos de enfermedades mentales en la RD del Congo

Las religiosas que cuidan a los ‘poseídos por los malos espíritus’

«A algunos enfermos mentales nos los traen sus familiares o la gente del pueblo atados (algunos con cadenas), son escenas muy duras las que nos encontramos cada día en nuestros centros médicos», explica Sor Ángela Gutiérrez, que lleva 35 años dedicándose en cuerpo y alma a los más vulnerables en la República Democrática del Congo. Concretamente las cuarenta personas (entre empleados y hermanas) que viven allí atienden cada año a más de 30.000 personas con trastornos psíquicos.

Esta ingente labor no ha pasado desapercibida y Ángela ha sido propuesta para el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2024. «Estamos muy ilusionadas porque con este premio podríamos visibilizar este grave problema y podríamos ayudar aún a mucha más gente. Ahora necesitamos ayuda para ampliar el centro de Telema Matete, una zona donde hay muchísimos pobres», afirma.

Sor Ángela Gutiérrez en R.D. del Congo